La DGT ya tiene preparada una normativa que garantizará que la acera es para los peatones, sillas de ruedas y carros de bebés y supondrá eliminar plazas de aparcamiento para coches
Los patinetes y las bicicletas tendrán prohibido no solo la circulación sino también el estacionamiento en las aceras según la normativa que tiene preparada la Dirección General de Tráfico (DGT). Así, la DGT prohibirá también aparcar en las aceras a bicis y patinetes (también eléctricos), al margen de reglamentos municipales que, como el de Valencia, ya prohíben usar estos vehículos por las aceras.
Así lo ha informado el director general de Tráfico, Pere Navarro, en la presentación de la campaña «Por aquí no puedo, por aquí no paso» impulsada por la Asociación de Personas con Lesión Medular y otras Discapacidades Físicas (ASPAYM).
sillas de ruedas y para los padres que llevan sillitas
Y ha recalcado: «La normativa que tenemos nosotros preparada ya la prohíbe, pero tampoco van a estacionar en las aceras», ha añadido.
En este sentido ha explicado que se deberán suprimir plazas de aparcamiento para automóviles para que se coloquen los patinetes, las bicicletas y las motocicletas.
El responsable de Tráfico ha valorado la bandera que ha enarbolado ASPAYM con esta campaña y ha recordado que además «hay nueve millones de mayores de 65 años que caminan mucho por prescripción médica o por razones de salud y que también quieren que las aceras estén libres de obstáculos».
Pere Navarro ha advertido además de que después del boom de la bicicleta «viene el de los desplazamientos a pie o en silla de ruedas por las aceras, que es un gran motor de transformación de las ciudades».
«Es verdad que salen obstáculos por todas partes y a veces no somos conscientes de que para la luz hay un palo que está en la acera y otros para el semáforo, la señal de tráfico o la papelera, además de las terrazas y la publicidad», ha comentado.
A su juicio «el reto es hacer un palo que aguante la iluminación, que a mitad lleve el semáforo, que encima esté la señal de tráfico y que también sostenga la papelera, lo que es un ejemplo de que solo es cuestión de poner imaginación para ir resolviendo todos estos obstáculos que no se ven desde un despacho pero sí desde una silla de ruedas».
Campaña de ASPAYM
«Encontrarnos con un patinete en medio de la calle o una plaza de aparcamiento reservada para personas con discapacidad y ocupada por cualquier otra persona, son sólo dos ejemplos de las barreras añadidas a las que diariamente se tienen que enfrentar este colectivo», añade Navarro.
Y ha incidido: «El nivel cultural cívico de un país se mide por la sensibilidad que hay hacia los colectivos vulnerables, entre los que se incluyen discapacitados y mayores, por tanto, ponernos en su lugar, actuar con responsabilidad y de forma cívica son cuestiones que no cuestan nada y que mejorarían mucho la movilidad en las ciudades y en especial de estos usuarios».
Según informa ASPAYM, la campaña es posible gracias a la colaboración de la Dirección General de Tráfico (DGT) a través de su convocatoria de subvenciones destinadas a programas desarrollados por entidades u organizaciones sin ánimo de lucro, cuyo objeto sea la atención, defensa o representación de las víctimas de accidentes de tráfico.
Además de la DGT, la campaña cuenta con la colaboración de un total de 17 entidades de diferente ámbito de actuación (tráfico, discapacidad, asociaciones de víctimas).