La decisión permitirá multar a quienes usen zonas distintas a las que pueden utilizar las bicis | Movilidad se inclina por que estos vehículos se aparquen en la calzada y que el límite de velocidad por el bidegorri sea de 20 km/h, según explica la concejala Arana (PNV)
¿Está pensando en comprarse un patinete eléctrico para moverse por la ciudad? Piénselo dos veces. El gobierno municipal va a prohibir antes de fin de año el uso de patinetes eléctricos por aceras, lo que permitirá a los agentes multar a quienes circulen por zonas exclusivamente peatonales. El Ayuntamiento corre para intentar regular un fenómeno que avanza más rápido que lo que tardan en fraguar los cambios normativos. El Departamento de Movilidad trabaja en modificar la Ordenanza de Circulación para contemplar esta nueva forma de trasladarse, cuando ya han llamado a la puerta de la administración municipal cinco empresas para poner en marcha servicios de alquiler ‘free floating’ de vehículos de movilidad personal (VMP).
Si ya había conflicto entre peatones y ciclistas llega un nuevo vehículo para alimentar la polémica de qué espacio otorgar a cada modo de transporte. Los patinetes eléctricos están a medio camino entre el skate y la motocicleta dado que algunos (los tipo scooter) pueden llegar a los 60 km/h, aunque lo normal es que se muevan entre 20 y 30 km/h, pesan unos 12 kilos, y tienen una autonomía de entre 20 y 30 km. Estos vehículos están en plena expansión como modo urbano de transporte personal, pero las ciudades no tienen aún una regulación concreta de la que echar mano. La Dirección General de Tráfico (DGT) trabaja en una norma y, mientras tanto, los ayuntamientos apechugan como pueden.
Dos son las claves para regular el uso de los patinetes eléctricos en San Sebastián:
por dónde permitir que circulen y dónde permitir que estacionen. Donostia quiere incluir todos estos aspectos en una próximo reforma de la Ordenanza de Circulación, pero cambiar una norma de este tipo puede costar un año de tiempo por los procedimientos administrativos a que está sometida. Por ello, el gobierno municipal va a adoptar en breve un acuerdo que deje claro, al menos, el primero de los aspectos. Según explicó la concejala de Movilidad, Pilar Arana (PNV), la Junta de Gobierno aprobará una resolución «antes de las Navidades» con la que se prohibirá a los patinetes eléctricos circular por las aceras. Estos vehículos solo se podrán utilizar por los bidegorris y, en general, los lugares por donde pueden transitar las bicicletas (zonas de coexistencia), pero no por las aceras que son de exclusivo uso del peatón.
Ante la ausencia de una normativa general que aclare el régimen de circulación para los VMP, los ayuntamientos están actuando a su libre albedrío. En Madrid, por ejemplo, donde está ya muy extendido el uso de estos vehículos, se les permite circular por los carriles bici y también por las aceras, en este caso con una limitación de velocidad de 5 km/h.
«Inestables»
Con la prohibición en vigor, los agentes de Movilidad podrán sancionar a quienes usen los patinetes eléctricos por las aceras, un ámbito que el Ayuntamiento de San Sebastián quiere preservar para uso exclusivo de los peatones. Arana indicó que ha usado personalmente estos vehículos y ha visto cómo funcionan en ciudades como Madrid y considera que «son bastante inestables», se requiere cierta pericia para usarlos, pueden alcanzar velocidades «muy altas», y eso en una ciudad con el firme mojado muchos días al año añade preocupación.
Otras de las cuestiones a especificar es la velocidad de circulación. Parece que la normativa de la DGT se inclina por permitir transitar por los carriles bici con un límite de 30 km/h. San Sebastián también ve excesiva esta velocidad y probablemente opte por limitarla a 20 km/h, aunque habrá que esperar a la modificación de la ordenanza para saberlo. «Si circulan a mayor velocidad que esa, deberán utilizar la calzada», apuntó la concejala.
Finalmente, otro de los asuntos importantes en relación a estos aparatos es dónde van a poder aparcar. En una ciudad que ya está saturada de bicicletas, motos y coches, la introducción de un nuevo vehículo en el reparto de la tarta del espacio urbano genera quebraderos de cabeza en el Departamento de Movilidad. Para guardar coherencia con la decisión de que los patinetes no circulen por las aceras, el Ayuntamiento de San Sebastián se inclina por que no estacionen en zonas peatonales, sino por habilitar espacios en las calzadas, como si fueran un vehículo a motor más.